Chief Reputation Officer

A continuación se presentará la información y datos más relevantes extraídos del texto Chief Reputation Officer facilitado a través del Aula Virtual:

La reputación corporativa ha ido aumentando su importancia en las empresas. Existen estudios que demuestran que este valor intangible cobrará más importancia en los próximos años con un incremento del 20%, llegando a ser importante para un 69% de las grandes multinacionales. Esta tendencia puede observarse en la actualidad, pues hoy en día, cada vez más empresas destinan sus esfuerzos a trabajarlo, pues la relación entre empresa y público es fundamental. En esta misma línea, los estudios también establecen que en España se prevé que se desarrolle hasta un 16,9% más.

Los principales CEO y directivos del Estado español consideran que la reputación corporativa debería dejar de tener relación y depender del área de comunicación y evolucionar hacia una especie de dirección, un departamento específico que dependa directamente de los altos cargos de la compañía o consejeros delegados, es decir, de la presidencia de la corporación.

El texto establece que la persona encargada de velar por la reputación corporativa es el Chief Reputation Officer y es aquella figura que se encarga de la reputación, marca, relaciones públicas, así como de los asuntos públicos. Además, este perfil profesional debería constituirse como la persona que gestiona de manera integrada, coherente, consistente, efectiva y eficiente toda la comunicación de la empresa, es decir, tanto la interna como la externa y en todos los puntos de contacto físicos y virtuales.

El texto afirma que ahora es el momento de que las compañías inviertan en formación de la dirección de la reputación y que ésta se cimente sobre cinco tipos de habilidades. En primer lugar, las cognitivas que tienen que ver con las nociones de comunicación y conocer el know-how. En segundo lugar, las analíticas para poder lograr un pensamiento causal y analizar las situaciones en contexto. También es necesario adquirir habilidades de procesos que permitirá contar con una capacidad de gestión del cambio y además, facilitar la coordinación y la ejecución. Las habilidades en comunicación son fundamentales, pues se deben conocer los distintos tipos de mensajes y contenidos estratégicos en relación a la reputación corporativa. Finalmente, las organizacionales que sirven para persuadir y alinear a las direcciones corporativas hacia una gestión de sus áreas.

El perfil ideal del CRO necesita trabajar conjuntamente y en sintonía con el CEO de la empresa en cuestión. Además, es esencial que tenga la suficiente autoridad e independencia para poder realizar su trabajo libremente. Por otro lado, ha de conseguir que los valores intangibles se integren plenamente en el funcionamiento de la compañía, es decir, que formen parte del trabajo del día a día. De este modo, una de sus principales y más importantes prioridades es que debe gestionar a la perfección y de manera integral el conjunto de intangibles. Además, ha trabajar con todas las áreas que se relacionan con los públicos externos.

Frente a la gran cantidad de cambios que se están produciendo en el mundo, a día de hoy, las grandes corporaciones necesitan desempeñar modelos de sostenibilidad y diferenciación porque los productos y los servicios que ofrecen a sus clientes son cada vez más similares. Por eso mismo, es fundamental trabajar a fondo los intangibles, pues estos serán los que conseguirán diferenciar a la empresas y, en ultima instancia, mejorar la reputación corporativa de las compañías.

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